Rocío Xiazhi duerme en este orfanato plácidamente, ajena a que su papá está a solo unos pocos kilómetros, a que mañana recibirá montones de besos que su papi lleva guardados para ella desde hace más de seis años. A esos besos, abrazos y achuchones que Pepe le dará por encargo nuestro, de sus cuatro hermanos y su mamá.
Rocío, duerme mi amor, que ya jamás volverás a estar sin el beso de buenas noches, sin la caricia, sin los abrazos de tus padres y hermanos.
Ufffff que emotivo! Es increíble, ese, milagro de la adopción! Después de 6años esos besos van a saber a gloria!
ResponderEliminarYa nos contáis mañana!
Besitos, ester